viernes, febrero 18, 2011

Alguna gente del barrio en el Maratón



Como ya sabéis mi afición no entro en aclaraciones. Dejo algunos detalles de la web de Amigos del Parque de María Luisa en los que aparecen algunos vecinos enfrentándose a Filípides.

El gran Pedro Infante


Mario de incógnito


Mané con muy mala cara, y eso que acababa de salir








2 comentarios:

Anónimo dijo...

Dedicado al Sr X, y no precisamente a Felipe González ex presidente del Gobierno.

Sr X, sabiendo de sus condiciones cristianas y amante de la Semana Santa vista desde la fe, me resulta extraño que no haya usted correspondido de igual manera conmigo que lo ha hecho con Don A.L.C. Usted está en su perfecto derecho de hacer lo que le plazca, pero con esa actitud es evidente que está usted molesto con mi comentario del otro día, cuando lo único que hice fue dar una opinión en el uso de la libertad de expresión que afortunadamente disfrutamos todos los españoles, esa libertad que a todos, incluido usted, nos ha permitido criticar decisiones políticas en las que no hemos estado de acuerdo, haciendo de la noticia o del personaje en cuestión blanco de nuestra "mofa" y nadie se ha rasgado las vestiduras, y eso debe usted de comprender que es tan válido como mi comentario. Porque si el otro día le pude molestar, en esta ocasión, nada ni nadie me obligaba a escribir lo que he dicho, pero aun siendo justificado su malestar ¿Dónde esta el señorio de las personas?.

Y cuando llegue esos días de la Semana de Pasión y veamos esas obras de arte pasear por nuestras calles con ese Cristo crucificado, o cualquier día acercándonos a una iglesia y contemplar esa imagen ¿nos dice algo o solo es un tramite rutinario?.

Al hilo de esto, voy a transcribir del padre Jorge A. Gandul algunos párrafos de su artículo, "Amar al prójimo como Cristo nos ama desde la cruz".

Cuando nos paramos a pensar un poco acerca de lo que es y lo que supone el amor de Dios por nosotros, no puede extrañarnos que se nos pida ese mismo amor.
El odio, el rencor, el resentimiento o la envidia no son conciliables con el estilo de Cristo. Es más, el viejo precepto "amarás al prójimo como a ti mismo" es elevado por Jesús a una altura mayor "Amen...como Yo los he amado". El modo de entender un cariño así es comprender que Cristo está en los demás. El amor que hemos recibido se paga dando amor, el mismo amor que hemos recibido de Cristo, debemos darlo a los demás.
¿No es un poco excesivo eso de orar por los que nos persiguen calumnian? Pensemos en el momento en que Jesús, roto por el dolor que le ata a la Cruz, exclama: "Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen".

Termina el padre Jorge A. Gandul, diciendo...Y decidámonos a amar a nuestro prójimo como Cristo nos ama desde la cruz.

Yo seré el primero en tomar nota de esto, pero usted Sr X también debe de hacerlo.

Un cordial saludo

Leandro Serrano

P.D. Perdone usted las posibles faltas de ortografía, pero yo no soy universitario

del porvenir dijo...

Si alguien ha entendido algo ruego que lo explique, porque yo pillo nada.
Gracias